Buzios, un destino tranquilo y pacifico a dos horas de Río de Janeiro

Este balneario de Brasil fascina con colinas suaves, arena blanda, calles de piedra y sus 23 playas.


Solo 170 kilómetros, que se cubren por carretera en cerca de dos horas, separan a Río de Janeiro de Buzios, uno de los destinos de verano más apreciados de Brasil.
El pueblo, donde viven 28.563 personas, ofrece 23 playas, entre las que se destacan las de Ferradura, Joao Fernandes y Tartaruga. A algunas se llega solamente en lancha, pero para alcanzar otras basta con caminar algunos cientos de metros desde el centro.
Antiguo pueblo de pescadores, Buzios comenzó a ser muy nombrado en la década de los 60 del siglo pasado, cuando la actriz francesa Brigitte Bardot vino de descanso y lo puso en el mapa turístico. Hoy, además de playas encantadoras, cuenta con numerosas boutiques , hoteles de lujo y restaurantes de alta cocina.
Buzios, con la firma de Brigitte Bardot 
Los botes de colores, anclados al fondo del mar, se mecen cerca de la orilla y olas pequeñas humedecen la arena, de un color ocre, que cobra más vida con el sol de las 3 de la tarde. Buzios, con sus calles de piedras y el azul y verde intensos de su mar, es el sueño de quienes quieren descansar en una playa.
Hasta la década de los años 60 del siglo pasado, antes de que a Brigitte Bardot se le ocurriera venir a pasar aquí sus vacaciones, este pueblo de la costa de Brasil vivía el anonimato de una villa de pescadores cualquiera. Pero desde que la actriz francesa lo puso de moda, Buzios empezó a ser frecuentado por turistas de todo el mundo. Incluso, ha recibido el nombre del Saint Tropez de Brasil.